Encontrar el regazo es volver al hogar, es ese calor, esa seguridad, ese hombro donde sentimos apoyo incondicional, donde somos escuchados, comprendidos, sentimos solidaridad, empatía y sabemos que no estamos solos. Todos los humanos buscamos compañía, esa persona que cuando está contigo, está absolutamente presente, que sabe brindar su regazo, ese espacio maravilloso donde nada falta, todo es completo, sin tomar en cuenta el tiempo, estar presente, aún siendo un instante, es vivir, es plenitud. Las personas , más allá del placer, el sexo, buscamos ese espacio de seguridad, donde podemos ser escuchados, abrazados y sentir esa paz y plenitud que necesitamos. Es necesario cultivar ese espacio interior, que nos permite conectarnos con el otro,para que de esa manera quiera realmente quedarse, es como ese sofá donde nos quedamos mucho rato por sentirnos cómodos, acogidos , que lejos de ser moderno y herm...