"Para comenzar a limpiar nuestros desperdicios interiores que nos llevan irremediablemente por caminos escabrosos, de piedras y espinas llegando a romper el tejido espiritual", debemos trabajar día a día en nosotros.
Este trabajo, por llamarlo de alguna manera, no es más que el estar atentos, convertirnos en nuestro propio observador, de cada palabra que pronunciamos, de cada situación que confrontamos, de cada reacción , emoción o sentimiento que tenemos, de cada pensamiento que se asoma convirtiéndose en acción, en fin estar pendientes de nosotros , a lo más mínimo que hagamos, sentimos o pensemos.
A veces creemos que para lograr esa paz tan anhelada , para limpiar toda esa basura que nos posee, debemos aplicar un sin números de técnicas, estrategias, estudiar a fondo, reprimirnos y muchas cosas más , sin embargo ,en lo sencillo está lo correcto, lo que tenemos que hacer es simple , está tan a la mano de todos los seres humanos y los niños lo saben muy bien, consiste en estar en el aquí y el ahora , que no es otra cosa que estar presentes, despiertos, atentos a nosotros mismos.
Todo esto tiene como consecuencia la comprensión, con tan sólo ver con atención, podemos lograr limpiar la basura que está acumulada en nuestro interior, y como ya sabemos , no se trata de esfuerzos, de resistencia, por el contrario se trata de fluir con la vida, pero desde la consciencia, que no es más que un estado de alerta total.
Para vivir en estado de gracia, nos puede ayudar mucho la permanencia con nosotros, ser nuestra compañía , sin hacer otra cosa que estar en silencio, lo que creará un sentido de equilibrio y paz interior que nos ayudará a vaciarnos de toda la contaminación y el estrés, también es conveniente el contacto con la naturaleza.
"Lo que nos permite evolucionar no está en el hacer sino en el Ser"
Comentarios
Publicar un comentario