No tengas hijos, a menos que te comprometas a darles todo
el amor y cariño que necesitan.
No tengas hijos, si no le vas a proporcionar el bienestar
económico para que tengan una vida digna. No tengas hijos, si no vas a tener para ellos el tiempo que
necesitan.
Es muy fácil traer hijos al mundo y luego no ocuparnos de ellos de forma integral.
Desde el momento que decidimos traer un hijo al mundo es nuestra
absoluta responsabilidad, no los tenemos para complacer nuestro ego, para
sentirnos acompañados, para que vean por nosotros en el futuro, los tenemos
para brindarles todo nuestro Amor, para compartir con ellos nuestra Felicidad y
nuestra Dicha.
Que difícil es ser niño y estar a la merced de los adultos
que con todos sus conflictos tratan de “educarlos” o “domesticarlos” más bien,
según su pensamiento, olvidando que esos seres son puros e inocentes y que son
una esponjita que todo lo absorben, olvidamos que escuchan y ven más de lo que
pensamos, estos pequeños piden a gritos amor, cariño y afecto, y nosotros los
adultos, padres estamos en la obligación de proporcionarles ese afecto, esa
seguridad, esa protección, ese ambiente
sano, lleno de armonía; ellos deben ser nuestra prioridad mientras son pequeños,
(es decir menores de edad) dependen de nosotros.
Pensemos y reflexionemos todo esto y abstengámonos de traer
seres inocentes al mundo cuando no estemos dispuestos a darles Amor.
Por muchas situaciones que se nos presenten en la vida, no
hay ninguna excusa válida para no brindar Amor a esos pequeños, el Amor no
tiene precio y es una energía que mueve al Universo.
Manifestémosle Amor a nuestros hijos que eso hará de ellos
personas Felices Integras, Dignas, capaces de caminar por la vida con seguridad
y firmeza.
Comentarios
Publicar un comentario