La vida de una persona y sus asuntos son reflejo de su conciencia.
Sin la vibración espiritual del yo más elevado, la naturaleza inferior se enfoca en las creencias dominantes de la mente de la raza y el ego personal, las cuales incluyen la dualidad y los opuestos el bien y el mal, la salud y la enfermedad.
Todo lo que no es perfecto en mi vida es una manifestación de las creencias falsas en mi mente y todas esas creencias falsas están relacionadas con el miedo.
Nadie me ha hecho nada nunca, fueron todos los pensamientos erróneos en mi mente los que se manifestaron.
Cuando nuestras mentes están libres para que la visión elevada se exprese, la manifestación de lo invisible en visible es natural y automática.
Hay que expandir la conciencia para aceptar sólo lo más elevado, lo más grande y lo más espléndido en la vida, permitir que el maestro que está en el interior haga el resto.
Lo que vemos en los demás lo estamos viendo en nosotros mismos.
Cambiemos las manera en que nos miramos y veremos diferente a los demás.
Si no tenemos el control de nuestros pensamientos, emociones y acciones, entonces las imágenes de la totalidad, de la abundancia y armonía probablemente se harán pedazos y el proceso del nacimiento de la forma de pensamiento deberá comenzar de nuevo.
El camino no se muestra a través de las emociones sino a través de la mente más elevada, a través de la facultad de la intuición. Los sentimientos pueden ser engañosos porque a menudo son reacciones del yo imperfecto.
Sin la vibración espiritual del yo más elevado, la naturaleza inferior se enfoca en las creencias dominantes de la mente de la raza y el ego personal, las cuales incluyen la dualidad y los opuestos el bien y el mal, la salud y la enfermedad.
Todo lo que no es perfecto en mi vida es una manifestación de las creencias falsas en mi mente y todas esas creencias falsas están relacionadas con el miedo.
Nadie me ha hecho nada nunca, fueron todos los pensamientos erróneos en mi mente los que se manifestaron.
Cuando nuestras mentes están libres para que la visión elevada se exprese, la manifestación de lo invisible en visible es natural y automática.
Hay que expandir la conciencia para aceptar sólo lo más elevado, lo más grande y lo más espléndido en la vida, permitir que el maestro que está en el interior haga el resto.
Lo que vemos en los demás lo estamos viendo en nosotros mismos.
Cambiemos las manera en que nos miramos y veremos diferente a los demás.
Si no tenemos el control de nuestros pensamientos, emociones y acciones, entonces las imágenes de la totalidad, de la abundancia y armonía probablemente se harán pedazos y el proceso del nacimiento de la forma de pensamiento deberá comenzar de nuevo.
El camino no se muestra a través de las emociones sino a través de la mente más elevada, a través de la facultad de la intuición. Los sentimientos pueden ser engañosos porque a menudo son reacciones del yo imperfecto.
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