El Abismo sin fondo del deseo no se llena nunca, a través de nuestros filtros mentales programados para sentir miedos, poder, egoísmos, codicias y muchas más cosas , vamos con rumbo equivocado, buscando sin fin, para hallar aquello que ya poseemos, pero no nos permitimos ver, ni sentir. Todos tenemos el anhelo de ser buenos, un propósito realmente encomiable, pero destinado al fracaso,hasta tanto no busquemos en el lugar correcto, dentro de nosotros mismos. Es absolutamente absurdo, tratar de cambiar la realidad externa , cuando previamente no ha habido un cambio interior, una transformación absoluta de nuestro Yo. Los seres humanos equivocamos el camino y nos montamos en una pesadilla colectiva del hacer,, del tener, de poseer, de dejar huellas, pero todo esto cara al exterior, sin haber producido la transformación del Ser. El ser humano en sus ansias de poder ha usado las enseñ...