El miedo surge cuando nos identificamos con irrealidades, por lo tanto es la asociación directa con la mente, de allí surgen todos y cada uno de los temores como el temor a la enfermedad, al abandono, al rechazo, a la muerte y al que todo lo engloba miedo a sentir miedo. Nuestra mente vive del pasado al futuro esto alimenta nuestra neurosis, aunado a lo que el mundo nos presenta a cada instante, las competencias, las apariencias, todo ese cúmulo de cosas que llevamos a cuesta y que de alguna manera nos mantienen en tensión, primero la lucha por obtenerlas, y luego por conservarlas, todo lo cual aumenta el miedo cada día. En la medida que nos apartemos a ratos del mundo y nos conectemos con nuestro espacio interior, lograremos alejar esa imagen ilusoria del miedo, al sentirnos en el aquí y el ahora le damos paso a lo que realmente somos, un alma que jamás puede perder nada, que simplemente "ES". ...